La "cabalgata indignada" arranca con 3.000 personas y una carga policial
Dos detenidos y cinco heridos leve tras la intervención de los antidisturbios
La marcha no había sido comunicada a Delegación de Gobierno
La "cabalgata indignada" reúne a 3.000 manifestantes en la Puerta de Alcalá, Cibeles y Sol. / CARLOS ROSILLO
Unas 3.000 personas se han concentrado en torno a la Puerta de Alcalá para secundar la última de las convocatorias del 15-M para reivindicar "reivindicar el papel de la participación ciudadana en la política frente a la dictadura de los mercados". La cabalgata indignada ha comenzado a las siete de la tarde con un ambiente más tenso que en otras manifestaciones organizadas por el movimiento ciudadano.
La policía ha cargado pasadas las siete y media de la tarde contra algunos de los manifestantes y ha terminado por detener a dos de ellos. Están acusados de atentado contra la autoridad por enfrentarse a los antidisturbios que les requerían que abandonaran un paso de peatones con el semáforo en verde para los coches. Cinco personas han resultado heridas en la carga policial después de que varios manifestantes se encararan con los agentes y terminaran a empujones. Dos de los heridos son policías. Al inicio de la manifestación, los antidisturbios se han puesto los cascos y estaban nerviosos porque la marcha no había sido comunicada a la Delegación de Gobierno, según han informado fuentes policiales.
Tras los primeros momentos de tensión, el ambiente se ha relajado y los indignados caminan, a ritmo de charanga, gritando "inocente inocente" en referencia a la fecha de hoy, día de los Santos Inocentes. El lema de la manifestación es precisamente: "Hemos perdido la inocencia". Se pueden ver numerosos muñecos que simbolizan popularmente a los inocentes.
Hay problemas de tráfico en todo el entorno de Cibeles, Gran Vía y Puerta de Alcalá según van pasando los concentrados. No paran de incorporarse más personas al recorrido que estaba previsto que partiera de la Puerta de Alcalá y bajase hasta Cibeles para llegar después a la Puerta del Sol. La fuente de Cibeles está protegida con vallas y numerosos agentes de la Policía Municipal que ven pasar a los manifestantes camino de la Puerta del Sol. A su llegada al kilómetro cero se han encontrado con cientos de ciudadanos que, por su presencia, dificultaban el acceso a la plaza.
Como en otras ocasiones el perfil del manifestante es variado con jóvenes, mayores, profesores de la marea verde educativa, miembros del 15M... Abriendo camino en la cabecera hay un camión grúa que reivindica con pancarta el derecho a la "vivienda digna y al alquiler social" ya que hay "casas sin gente y gente sin casas". La mayoría de los manifestantes van disfrazados, alguno de ellos como figuras de Belén y ladrillos de un "portal que va a ser desahuciado", y algunos vestidos de fantasmas que marchan al grito de "que pasa, que pasa, que no tenemos la casa", informa EFE.
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